Claire se queda sola

Las desgracias se amontonan en la vida de Claire, todo hay que decirlo. Justo el día que da a luz a su primer hijo, la abandona su marido, que ni tan siquiera tiene la delicadez de irse con una mujer más delgada que . Con una pequeña recién nacida, unos kilogramos de más y el cuerpo ensanchado y irregular tras el embarazo, Claire se ve obligada a comenzar una nueva vida. No obstante, en su especial familia irlandesa hallará un buen paño de lágrimas, y entre la risa y el lloro emprenderá una meteórica restauración siendo la más sorprendida.