Los príncipes solo viven en los cuentos

Bibi lleva años enamorada de Gonzalo, su nuevo jefe. El habitual caso de amor platónico insanable.

Gonzalo, en vías de restauración tras un desengaño cariñoso, ni se imagina los sentimientos de su secretaria.

A Rolo, el amigo de Bibi, le agradan todas y cada una y a Taty, la amiga de Gonzalo, no le agrada ninguno.

Irene, la madre de Gonzalo, desea que su hijo se case con Taty.

Taty asimismo desea casarse con Gonzalo, si bien no por los motivos adecuados.

Gonzalo, en cambio, no desea casarse con Taty, mas los suyos sí son los motivos adecuados.

Lo malo es que Bibi está segura de que Gonzalo ama a Taty.

A lo que hay que agregar que Rolo abriga pretensiones inconfesables cara la amiga pija de Gonzalo.

Eso sí, Taty pasa millas de Rolo, al que considera un patán sin muchas luces.

Sin embargo, absolutamente nadie cuenta con el Destino, que ha decidido meterlos a todos juntos en una coctelera y agitar.

Y, si bien parezca increíble, de todo este lío brotará el Amor Auténtico. El amor que anda junto a ti en lo bueno y en lo malo. Ese amor del que no se habla en los cuentos.