Siempre serás mi chica

Tanner Adams está atravesando su peor instante profesional: ha perdido la inspiración, aún no ha sido capaz de lograr el número uno en ventas y, a sus treinta años, se siente solo pese a haber logrado a la chavala dorada del pop, Lady Lillie McFly.
Sin embargo, la repentina muerte de su padre, con quien no se había hablado a lo largo de años, le fuerza a regresar a su pueblo natal, aquel que le trae tan dolorosos recuerdos y que está ligado a la pérdida del único amor auténtico que ha sentido en su vida.
Será allá, en Scarborough, un sitio en la costa norte de Yorkshire, donde Tanner va a poder regresar a conocerse y, sobre todo, a rencontrarse consigo y con la muchacha que dejó atrás, su pequeña Yellow.