Un pequeño traspié

Si pensabas que te habías reído con un Chick Lit, es por el hecho de que aún no has leído ‘Un pequeño traspié’ A Gloria le encanta su trabajo en la sección de tendencia de Oh, my Goodness!. Es una chavala feliz y merced a su personalidad vibrante y presumida su tarea en la gaceta le va como anillo al dedo. Mas el día que la mandan al pase para la prensa de una película no logra comprender la trama y se queda dormida en el cine. Atemorizada y inquieta por no saber de qué forma redactar la crítica que debe dar, no se le ocurre otra cosa que hacerse con la de Diego, el cronista que ha estado sentado en la silla al lado de la suya, y su recurso agobiado resulta ser una mala solución. Gloria no se imagina de qué forma su fallo va a mudar su alegre día tras día. Cuando Diego va en su busca para recriminárselo, una serie de incidentes tan cómicos como irritantes empiezan a sucederse en la vida de Gloria. Semeja que no existe forma humana de deshacerse de él y la bola que ha creado no para de medrar y medrar. Por si acaso no tuviese poco, sus mejores amigos están a puntito de casarse y Carolo está tan histérico con los preparativos de su boda con Armando que la poca paz mental que le queda a Gloria se la hurta . Sus continuos fallos hacen que Carolo se transforme en un inconveniente más de su larga lista, al paso que Diego, sin que Gloria se lo espere, comienza a transformarse en una parte cautivadora de su vida.